¿Qué es el evangelio? Una primera reflexión.



Una pregunta tan importante como esta difícilmente quedará zanjada en un artículo simple y breve como este. Sin embargo, y debido a que hoy comenzamos a ver esta temática en mi congregación, me he sentido impulsado a escribir de algunas de mis preocupaciones, las que pueden hacerte sentir acompañado en caso de que fueran las tuyas o, las que en caso contrario, te puedan generar incomodidad y algún grado de amenaza. Lo siento, soy lo que en USA llamarían WYSIWYG, What You See Is What You Get. (lo que ves es lo que obtienes)

Un par de ideas claras desde un principio.

1.- Admiro y considero inspirados los textos del Nuevo Testamento. Mis predilectos son los evangelios y Apocalipsis.
2.- Particular admiración me provocan los textos paulinos por su enfoque pastoral, aunque sean más los que ven en ellos una exposición de teología sistemática que de consejos pastorales.

Una preocupación

Hace varios años me pregunté: "¿César, lo que crees es fruto de lo que te enseñaron decían las Escrituras o es fruto de haberlas leído sin marco denominacional alguno?" La respuesta fue evidente, mis ideas de Dios, el evangelio, escatología, etc. provenían de un tipo de enseñanza con un profundo sesgo denominacional, bien intencionado pero "premoldeado" para ser aceptado, vivido y defendido con uñas y dientes. De ese ejercicio introspectivo han  surgido cientos de reflexiones y reestructuraciones en mi sistema de creencias.

Una de las preguntas que más me costó abordar es la que lleva esta nota: "¿Qué es el evangelio?"

Algunos piensan que intentar responder a esta pregunta es un signo de mala praxis de la enseñanza de la iglesia, algo así como: "eso debiera de estar clarísimo!!" Pienso que cada generación honesta debe releer, investigar y repensar el discurso respecto de esta pregunta. Para ello, la invitación no es a sumergirse en las sistemáticas más ortodoxas que nuestra tradición cristiana apruebe a fin de refrescar lo que debiera estar ya sabido. La invitación debiera concistir en tres elementos que creo fundamentales: 1.- El texto bíblico 2.- El contexto histórico en el que están sumergidas todas las expresiones "evangélicas" 3.- La historia del pensamiento cristiano.

Algunos dicen que, respecto a doctrinas bíblicas, se debe enseñar todo aquello que siempre se ha creído en todas partes del mundo cristianizado, ciertamente en ese consejo la palabra "siempre" tiene un alcance muy limitado.

¿Qué es el evangelio?

Esa es una pregunta que este artículo no pretende responder de manera exhaustiva, más bien lo que se pretende es que cada persona que lea estas letras se sienta en la necesidad de busca la respuesta a esa pregunta de manera honesta.

Escuchando a los "grandes paladines de la ortodoxia" me he topado con al menos con tres factores comunes:

1.- La reducción del evangelio de Jesús a la exposición e interpretación de los últimos días de vida de Jesús, su muerte y su resurrección. En ese énfasis da la impresión que la vida del Cristo es un detalle, un compás de espera entre la encarnación y la muerte. No me mal entiendan! creo que los eventos citados son importantes y traumáticos, tal vez por eso necesiten ser "explicados". Básicamente el enfoque está centrado en las didacticas paulinas pero no siempre con una buena compresión de ellas.

2.- Que para que este evangelio (buenas noticias) sean realmente buenas noticias, deben de poner al corriente a las personas de las "malas noticias". Claro!! eso tiene sentido!! ... o no?

Me recuerdan mis años de trabajo en marketing, esos años en los que el objetivo principal era generar una necesidad que luego el cliente sintiera que debe suplir a la brevedad.
¿Y cuáles serían las malas noticias? Por amplia mayoría en las encuestas, la mala noticia es el infierno eterno. De ahí que en una gran cantidad de exposiciones de evangelismo, el fin último de la salvación está centrada en otro lugar más allá de esta tierra. "Somos peregrinos en esta tierra..." "aunque el mundo nos desprecie no importa porque no somos de este mundo..." "cuando estemos allá..." etc. decenas de expresiones que tienen un sentido y fundamento bíblico pero que son usadas e interpretadas de maneras muy distintas al mensaje general de la Biblia.

3.- Una forma extraña de contar la historia de redención.

Historias bien contadas contienen giros dramáticos que le dan interés y ponen de relieve elementos importantes en la narración. ¿Cómo se sentirían si yo les contara una historia así?:

"... entonces llegó y le dijo: -esta es mi venganza!!- luego le disparó, tomó el bolso que estaba tirado en el piso y se lo entregó al inspector del cuadrante 21."

Ok, ¿no creen que se pierden de algo? Digo,la situación se puede entender "más o menos" bien pero dista mucho de poder ser realmente comprendida. Estoy contando la historia desde muy adelante.

De la misma manera creo que cuando se cuenta "el plan de salvación" partimos por lo general desde Génesis 3 y rara vez desde Génesis 1. En consecuencia eso muestra la motivación de nuestro discurso, mostrar que el hombre está arruinado y necesita ser rescatado. Pero no contiene nada de su amante creación y propósito para con su creador.

¿Qué pienso al respecto?

Creo que el ser humano en general es adicto a las certezas, a querer explicarlo todo, incluyendo a Dios mismo.

Creo que el énfasis en el Jesús divino nos aleja de manera notable del Jesús humano. El Jesús de la fe parece estar en constante pugna con el Jesús de la historia, pero esa es una yuxtaposición que nosotros hemos querido generar y que no parece existir en el texto neotestamentario. Al parecer lo que si existe es una tensión y no una oposición.

Me pronunciaré en el mismo orden que hice mis observaciones anteriores:

1.- En 10 ocasiones se mencionan en los evangelios la palabra "evangelio".
  • - Jesús predica el evangelio (Mt. 4:23; Mt. 9:35; ) ¿Predica de su pasión, muerte y resurrección? Evidentemente no!
  • - Jesús envía a sus discípulos a predicar el evangelio mucho tiempo antes del fin de su ministerio. (Lucas 9:1-6) ¿Cuál era la predicación de los discípulos? ¿Declaraban la divinidad de Jesús o lo que le ocurriría a este? Es difícil de imaginar que ese fuera su objetivo.

Nuestra predicación actual está mediada en gran parte por la interpretación paulina de lo ocurrido y respecto de esa interpretación nosotros podemos tener nuestras interpretaciones (las tenemos) pero sería importante no olvidar que antes de la pasión, muerte y resurrección de Jesús, ya existen buenas noticias que no deben de estar ausente de nuestra exposición del evangelio.

2.- No me agrada poner al infierno como uno de los ejes de la predicación del evangelio, simplemente no veo que ese fuera el énfasis de las predicaciones registradas en el Nuevo Testamento.
  • -No fue el eje en la predicación de Jesús, quién mencionó el infierno no en relación al castigo posmortem por rechazar su mensaje, sino:
  1. - Para animar a sus discípulos a no temer. (Mt. 10:28; Lc. 12:5)
  2. - En relación a los fariseos que oprimían al pueblo con sus mandamientos (Mt. 23:15; Mt. 23:33)
  3. - En el contexto de la hipérbole que muestra el comportamiento en relación con el pecado y la relación con el prójimo (Mt.5:22; Mt.5:29-30)
  • -No fue el eje en la predicación de Pedro el día de pentecostés. (Hechos 2)
  • -No fue el eje en la predicación de esteban frente al sumo sacerdote. (Hechos 7)
  • -No fue el eje cuando Pedro le predicó a Cornelio. (Hechos 10)
  • -No fue el eje de la predicación de Pablo en Atenas. (Hechos 17)
  • -No fue el eje de ninguno de los apóstoles en sus cartas. 
(mención aparte por énfasis y estilo literario merecería el libro de Apocalipsis)

3.- Pedro  y Pablo son buenos ejemplos de apóstoles que predicaron el evangelio contando la historia desde el inicio.

Pedro lo hace desde su contexto judío, para judíos y posélitos del judaísmo, por lo tanto su énfasis es en el cumplimiento de las Escrituras en relación al Cristo. Es lógico e inteligente para Pedro iniciar desde un plano autoritativo común como lo sería la Biblia hebrea. (Hechos 2:16)

Más tarde Pedro predicaría a un hombre "temeroso de Dios" como Cornelio. Un temeroso de Dios era un tipo de persona que simpatizaba y se interesaba sinceramente en la religión de los judíos. Pedro "inicia" señalando el carácter "universal no exclusivista" de Dios. (Hechos 10:34-35)

Pablo cuenta con un ejemplo notable en el Areópago. Les cuenta la historia desde el "inicio". Les muestra que este "dios no conocido" es el Dios que ha creado todas las cosas y a ellos incluídos; les muestra que este Dios no necesita que le "mantengan" sino que es este Dios quien les sostiene a ellos, etc. etc. el desarrollo argumentativo de Pablo y su sensibilidad con la cultura griega es formidable. (Hechos 17:22ss)

Conclusión?

La verdad es que pensé escribir mucho menos, yo apenas quería sembrar el deseo de investigar qué es el evangelio. No obstante, a pesar de haberme extendido, este puñado de párrafos apenas rasguña la superficie.

Creo que tenemos que sentarnos a reflexionar en comunidad y con seriedad respecto de nuestra proclamación evangélica. ¿Son buenas noticias las que proclamamos? Ciertamente el mensaje del Dios encarnado, que se humilla, muere y resucita sigue teniendo relevancia y poder  hoy, al menos esa es mi fe y la valoro tanto que no me contentaré con asentir con la cabeza un discurso lleno de palabras rimbombantes, (de esas que nos inventamos en teología) que parecen explicarlo todo, sino que pasaré tiempo reflexionando al respecto y en cómo comunicar este mensaje con la mayor claridad posible.

Piensa... te va a gustar!








0 comentarios:

Publicar un comentario

Total Pageviews

Con la tecnología de Blogger.

Search Box